Antes del partido, entre banderas, cánticos y puestos de comida, un grupo de hinchas con una remera particular llamaba la atención en los alrededores del Madre de Ciudades. La inscripción “Categoría 59” en sus camisetas era más que un dato: era un símbolo de amistad, historia y pasión por Platense que nació desde la infancia.
“Es una categoría que salió campeona en el año 77, justo cuando Platense había ascendido a Primera”, cuenta Aldo Barice, arquero de aquel equipo juvenil. “La mayoría nos conocíamos desde los siete u ocho años, jugando en infantiles de Platense. Con los años seguimos juntos, algunos pasamos a las inferiores del club, y otros llegaron más lejos. Yo, por ejemplo, jugué en Primera”, agrega Barice, que estuvo acompañado por Claudio Cereza, Rodolfo Lozano, Omar Cisneros y Claudio Szpín.
Barice fue arquero en uno de los momentos más difíciles del club. “Me tocó estar en el 'Cuadrangular de la Muerte', ese que jugaban Gimnasia, Chacarita, Atlanta y Platense. De esos cuatro, tres descendían. Nosotros fuimos los únicos que nos salvamos. Jugué ahí, después estuve un año más y pasé a otro club. Pero siempre fui y sigo siendo fanático de Platense”.
Ver al equipo en una final le genera una emoción distinta. Ya no está bajo los tres palos, pero su mirada de arquero sigue atenta al que hoy defiende el arco del "Calamar".
“Juan Pablo Cozzani es muy buen arquero. En los momentos clave respondió bien, lo necesitó el equipo y ahí estuvo. Me pone muy contento que le vaya así de bien”, comentó.
Para Aldo, el recorrido de Platense en este torneo tuvo una carga simbólica parecida a aquellas épocas de sufrimiento.
“Antes, nos daban por descendidos y nos terminamos salvando ganando partidos clave. Hoy también: muchos lo daban afuera en cada fase y eliminó a todos los grandes. A veces es así con Platense, no lo tienen en cuenta, pero siempre aparece”, explicó el ex arquero que forma parte de un grupo que se sigue reuniendo con frecuencia.
Claro; la categoría 59 no es solo una fecha, es una identidad.
"Hoy jugamos una final", dijo Barice con orgullo
“Nos juntamos cada mes, más o menos. Esto que ves no es nuevo. Estas camisetas las tenemos hace años. Una vez fuimos a la cancha a dar una vuelta cuando jugaba Platense y dijimos ‘hagamos una remera para identificarnos todos’. Desde ahí, cada vez que podemos, estamos”, dijo.
“Esto es diferente, claro. En aquella época teníamos que salvarnos del descenso. Hoy jugamos una final”, remarcó Aldo, que con 66 años siguió firme con sus amigos de toda la vida en una consagración que quedará para la historia del "Calamar".